domingo, 19 de junio de 2011

Que feo es a veces no sentir lo que se supone tienes que sentir y estar atado a un recuerdo que ya fue...

Poca gente en su vida, bueno, no poca gente de hecho la gran mayoría de toda la gente que habitamos en este mundo, hemos pasado por cosas que han marcado nuestra vida ya sea el nacimiento de un hijo, Cuando entras a la institución -en cualquier ámbito que quieras- que deseabas, cuando te enamoras, o cosas así, Y no me dejaran mentir al decir, que se quedan guardadas en la memoria a veces tan dentro que ya ni las puedes sacar para recordarlas, Pues bueno, después de este momento introductorio a lo nuestro.
Que pasa cuando esa emoción que nos albergaba ante ese suceso importante, ya no están importante que digamos, y digo esto por que a veces hay factores que influyen en la forma de ver las cosas, y simplemente, pues como que se les va el brillo a esas cosas, y por mas que intentas ya no puedes recuperar ese brillo.
Pues la cuestión de esto es simple...Una vez, andando de alucines en alucines, llegue al rosario de un amigo de la familia, vamos que la tradición es que se le haga una novena...El día que asistí fue casualmente el día que terminaba dicha novena, así que se supone se tenia que recoger la cruz, -gran historia, por cierto- Así que pues entre ciertas imágenes que tengo, -yo rezando, cantando, y otras cosas- escuche, o se me figuro escuchar una máxima que dudo pueda olvidar.
Y es que hay gente que por perder y ya no poder recuperar el brillo en ciertas cosas cuando las pierden, si, se siente una gran tristeza, por que saben que ya nunca de los nunca volverán a tener a las personas a su lado, pero, no sienten un gran vació, no les da por arrastrarse suplicando que la vida no los condene a esa perdida, no ruegan por que la propia vida sea tomada en lugar de la de esa otra persona...simplemente se queda el eco, del vació... la víspera de la soledad, es solo Eso lo que queda, y todo se empieza a hacer un teatro, se ve al fondo la madre del difunto... los hermanos y hermanas... todas y todos pensando en que la otra persona guardara el luto debido, que respetara la memoria del caído y vivirá sola, en compañía del espíritu de su amor....
Pero la verdad es -- y es una pregunta abierta-- que se supone se debe hacer si ya el amor no existía, si ya no se podía lidiar con el escenario, si solo era rutina...
que se supone que se debe hacer cuando el verdadero amor ha crecido en otra persona, que moralmente no es la correcta, que se supone si todo era una farsa, que puede convertirse en realidad, pero que esta capturada por los sofismas de la sociedad que dicen que se debe y que no se debe hacer...
Ah gente que lea los anteriores párrafos juzge poniéndose en lugar de las personas y olviden las viejas reglas morales, que en el fondo todos sabemos nos atan y condenan.

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